¡Todas nuestras excursiones en el bosque son diferentes! Nuestra amiga Kii Fujii, ha reforzado su relación positiva con la naturaleza, especialmente con los colibríes, y ahora tenemos una protectora de sus hábitats y amante de fotografiarlos.
La relación entre las personas y la naturaleza es esencial, y muchos estudios indican que el contacto auténtico con la naturaleza genera bienestar físico y mental en las personas.
La observación de aves es una actividad que realmente permite conectarse con lo natural y contribuye a proteger la salud, física y mental.
Cuando observamos aves, nos ejercitamos y respiramos aire fresco mientras caminamos en medio de un bosque, playa u otro espacio natural; también, generamos atención, reflejos y velocidad mental cuando identificamos, reconocemos y analizamos el comportamiento de las aves. Además, nos permite mejorar nuestras relaciones sociales al conocer otros amantes de las aves.
En febrero de 2020, luego de ver un video de colibríes que publicamos en Facebook, Kii Fujii, se contactó con nuestro equipo para diseñar su expedición, tenía un gran interés en observar y fotografiar colibríes, en especial, el Colibrí Maravilloso y la Coqueta de Cresta Rufa.
La expedición fue muy satisfactoria, pudimos observar en tan sólo 4 días, alrededor de 43 especies de colibríes entre los que destacan el Ermitaño de Koepcke, la Coqueta de cresta rufa, la Cola de espina de cresta alambrada, el Ángel real, la Cola de raqueta y el Colibrí Maravilloso.
Estamos seguros de que nuestra amiga continuará con su hobby y también contribuirá al cuidado de los bosques y contará sus grandes historias a los nuevos aventureros amantes de la naturaleza.
En la relación positiva hombre – naturaleza, todos ganan, por un lado accedemos a un entorno que genera salud física y mental, y por otro lado, nos convertimos en agentes defensores de ella.