Perú ofrece diversas oportunidades para la observación de aves y se pueden diseñar expediciones de acuerdo a las necesidades y/o modalidad de viaje de los turistas, como partiendo desde un crucero en el muelle del Callao y Paracas.
Steven Hall y su padre viajaron por la costa de Sudamérica en el crucero Norwegian Cruise Line en enero del 2024 y buscaron realizar observación de aves en cada parada del crucero y nos contactaron para armar una expedición de observación de aves desde los puertos de Callao y Paracas, expedición que detallamos a continuación.
Observación de aves en los Andes peruanos partiendo desde el Callao
Inicialmente la parada en el Puerto del Callao era el 15 de enero, desde las 8 de la mañana hasta las 6 de tarde, por lo que debido al corto tiempo, la expedición se iba concentrar en espacios naturales cercanos a Lima como el Refugio de vida silvestre de Pantanos de Villa y otros aledaños. Una semana antes del arribo del barco, nuestro cliente Steven nos comunico que por motivos diversos la parada en Callao se iba a extender y el crucero iba a pernoctar y el retorno al buque podría darse hasta el 16 de enero a las 6 de la tarde, en ese sentido propusimos cambio de itinerario para visitar los andes de la región Lima.
La expedición inicio a las 9 de la mañana desde el Callao, desde donde partimos hasta la cuenca de Santa Eulalia, y luego de un reparador desayuno-almuerzo, iniciamos a observar aves alrededor del medio día.
A pesar del horario, pudimos observar interesantes especies en el sector bajo de la cuenca como los endémicos Carpintero de cuello negro y Fringilo-Inca Grande. Pasando el puente Autisha, entre las 4 y 5 de la tarde inicio el espectáculo de una pareja de cóndores, a una distancia no muy lejana pudimos observar un cóndor hembra posada sobre un piedra, acicalándose y reposando antes de tomar vuelo, luego de 30 minutos apareció en vuelo un cóndor macho muy cercano a nuestra posición, una y otra vez, casi por 15 minutos, fue una experiencia memorable, sobre todo para Steven y su padre.
Las listas de aves observadas el primer día son las siguientes:
Santa Eulalia 1 Santa Eulalia 2 Santa Eulalia 3
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Al día siguiente luego de desayunar iniciamos la actividad desde las 7 de la mañana cerca al centro poblado de Huachupampa. Las especies más interesantes observadas fueron: Matorralero de Vientre Rojizo, Cometa de Cola Bronceada y Perdiz andina. Luego de 3 horas de observación en la zona, iniciamos el retorno hacia Lima, haciendo paradas estratégicas para seguir observando otras especies. Para cerrar el día, se realizó una visita en el El Humedal Costero Poza de la Arenilla en la Punta Callao, donde destacaron playeritos y otras especies costeras.
A continuación se adjuntan las listas de aves registradas el segundo día:
Santa Eulalia 5 Santa Eulalia 6 Santa Eulalia 7 Santa Eulalia 8
Santa Eulalia 9 Santa Eulalia 10 La Punta, Callao
Observación de aves en Paracas
El día siguiente, 17 de enero, partimos de madrugada a Paracas, para realizar el recojo de los clientes al Puerto y luego iniciar las actividades de observación de aves programadas. Iniciamos la actividad de observación de aves en un humedal cercano a la ciudad de Pisco, donde destacaron el Rascón plomizo, Zambullidor Grande, Aguja de mar y Chirigüe común, entre otras especies playeras y costeras.
Las especies observadas se pueden visualizar en el siguiente link:
Después de almorzar en una cevichería tradicional del muelle de pescadores de Pisco, nos dirigimos hacia la Reserva Nacional de Paracas, donde realizaríamos los últimos avistamientos de aves de la zona y concluiríamos la expedición en Perú. En camino a Paracas, pudimos observar varios Flamencos en la playa aledaña a la carretera y realizamos una parada para observarlas y fotografiarlas de cerca, otro gran momento del viaje.
En la Reserva Nacional de Paracas podemos destacar la observación de Gaviotín peruano, Minero peruano, y Halcón peregrino. Los últimos registros se detallan a continuación:
En total, en el viaje se pudieron observar hasta 101 especies, de los cuales 54 fueron lifers y 5 fueron endémicas, concluyendo un viaje satisfactorio, con grandes emociones y especies muy representativas de la costa y andes del Perú.
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